jueves, 28 de abril de 2011

San Agustín de Valle Fértil

Después de un viaje largo, llegué a San Agustín de Valle Fértil, en la provincia de San Juan. Este es un pueblito de 4.500 habitantes, retranquilo.
Llego al hostel y vaya fiesta había montada... un party hostel?? No un grupo de sanjuaninos con unas ganas de fiesta que para qué, completaban el grupo 3 franceses relocos y una chica de San Sebastián. Fue fácil establecer amistad con ellos.
Y resulta que ese día era la fiesta del pueblo!! Así que todo el hostel unido nos fuimos a cenar una milanesa a la napolitana (=un filete empanado con jamón york y queso por encima) y después a la particular verbena.
La verbena consistió en la sucesión de grupos de folclore. Es bastante interesante... y como plato fuerte estaba La Banda XXI, un cuarteto, pero ni de viento, ni cuerda ni nada de música clásica, sino más bien, según me explicaron iba a ser una especie de reggeaton... así que como me estaba entrando sueño y al día siguiente me iba de excursión... hice la del humo y no vi al cuarteto. Pero por supuesto los sanjuaninos y los franceses se quedaron bebiendo fernet con cocacola (=un licor de hierbas que les encanta).
Al día siguiente visita al Parque Nacional de Ischigualasto, o Valle de la Luna, por sus paisajes lunares:



De nuevo, caprichos de la Naturaleza. Este parque se formó cuando lo hizo la cordillera de los Andes, por el choque de las placas tectónicas. Las capas del terreno, que se formaron ordenadamente con el transcurso del tiempo, se desarmaron con el choque y como explicaba el guía, nos permiten ver un libro de muchos millones de páginas expuestas horizontalmente. Y a esto hay que añadir la acción erosiva del viento y el agua:

¿Valle de la Luna o Egipto?

Cancha de bochas: pelotitas que se forman en torno a los puntos de energia

Esto si que son vacaciones!!!

El Submarino, al fondo un murallon de piedra bien roja

El hongo

Mi sombra en el atardecer

A parte de las curiosas formas, en este parque se encontraron los restos fosiles de dinosaurios bien antiguos. Una gran visita.
Al dia siguiente queria ir al Parque Talampaya, para admirar otras formaciones en las rocas... pero no habia gente suficiente, asi que me quede en el pueblito.
El chico del hostel me dejo una bici, bien destartalada todo hay que decirlo, y me fui a andar. Me recomendaron ir al museo de las piedras del mundo, que esta en medio de la ruta, a 10 km de Valle Fertil. Asi que con mi bici, pedaleando por la ruta, ahi que me plante.
Y que museo mas interesante! Pequeñito pero estaba genial. Constaba de tres salas. En la primera estan expuestas muchas rocas, minerales, elementos quimicos... con sus correspondientes estructuras quimicas (la celdilla unidad... vaya recuerdos, jaja!!), densidad, dureza, etc etc... El señor estuvo conmigo todo el rato y me explicaba muy bien las cosas, todas las dudas, curiosidades, preguntas. Por cierto, he de decir que le gusto la camiseta que el Comite de Sabios me regalo!! :)
Segunda sala, la de los bichos: mariposas, avispas, avispones tan grandes como mi mano, viudas negras, arañones con patas peludas, escorpiones, escolopendras... todos bichitos de la zona... en un panel estaban los mas peligrosos, esos que si te pican o te muerden te inyectan un veneno que afecta al cerebro, te paraliza los musculos y en unos minutitos estas mas tieso que un palo. Pues todo esos animalitos estan en Valle Fertil... asi que al dia siguiente revise mis zapatos, claro... y creo que no he vuelto a dormir tranquila sabiendo que en Argentina hay esos bichos feos, jiji.
Y por ultimo, la ultima sala era de las aves, mamíferos y tambien contenía una exposición de cositas del mar: estrellas, caracolas, corales... y por supuesto bichos venenosos, pero de esos no tengo miedo porque no me voy a bañar en los mares argentinos!
A la salida, el hombre casi me pide matrimonio... madre! Y me tuve que volver volando porque se estaba haciendo de noche, tenía 10 km por pedalear y no tenia ni luz ni na!! Pero sana y salva llegué... y esa noche nos fuimos a bailar tango con el del hostel y con los muchachitos del pueblo!! Probé una nueva modalidad: tango fantasía e hice saltos artísticos y todo. Pero me gusta más el tango porteño, qué le vamos a hacer.
Y por fin, al día siguiente al Parque de Talampaya. A diferencia del otro lo curioso del paisaje era el estar encajonado entre dos murallones de piedra bien roja, de casi 200 m de altura.
Hicimos eco eco, entre los paredones, vimos catedrales esculpidas por el viento, un monje, otros honguitos parecidos a los del Valle de la Luna... pero las fotos ya vendrán, pues las tengo en la segunda tarjeta de memoria! Y no las descargué aún :)
Y ya me despedí de Valle Fértil y de la provincia de San Juan y me dirigí a "La Docta", la ciudad de Córdoba (donde no hay salmorejo ni mezquitas!! pero sí otras lindas cositas).

Las fotos pendientes: Mendoza

Detalle de los azulejos que decoran la Plaza de España de Mendoza

Dibujo del libro Martín Fierro, el Quijote argentino

¿Por qué lo llamarán Cerro, si es el techo de América?

Al fondo, el cerrito. Al frente, dos bellas flores

 El Puente del Inca, curiosa formación natural




Las fotos pendientes: Valles calchaquíes, de camino a Cafayate

 El Anfiteatro: moldeado al capricho del agua y el viento


Panorámica de las montañas rojas

Dani y Lena con una llamita sexy

Bodegas!!

 Así funciona un bidet argentino!!

 Río colorado... y pies morados de lo fría que estaba el agua

 Vista del valle con Cafayate al fondo

 Casitas y cositas de Cafayate

Nuestro primer mate

Las fotos pendientes: Valles calchaquíes, de camino a Cachi

El valle y eso gris que parece un camino es el cauce de un río que cuando lleva agua... se lleva por delante a los autos!!

Vaya carreteritas...

Parque Nacional Los Cardones: cardones 
petisos (=chiquitos), muy cómodos

Un cardón con brazotes

 Cuidado con los guanacos!! 
Están en la carretera como las vacas en Regumiel

Las fotos pendientes: la aventura salteña-jujeña

Vista panorámica de Salta desde un cerrito, qué pose la Mara

Por las calles de Humahuaca

Nuestro auto

La Garganta del Diablo, en Tilcara

 Cerro de los 7 colores, Purmamarca

 Pedro, Luisa, Sarini y Mara
haciendo el tonto en Salinas Grandes

Las fotos pendientes: Buenos Aires con la Mara



 Puerto Madero: zona moderna y pija de Buenos Aires

 La Boca: bar enfrente de La Bombonera, estadio de Boca Juniors

 El ligue argentino de la Mara:
Maradona, no es una persona cualquiera...

 Caminito: la calle más famosa de La Boca

Coloreadas calles de Caminito: en su origen las fachadas eran chapas de barco que fueron coloreadas... y parece que se puso de moda!!

Las fotos pendientes: Iguazú y San Ignacio

FOTOS IGUAZÚ
Mariposa 88, ¿sabéis por qué?

 Mara en la Garganta del Diablo

 Los glotones coatíes

Lado brasileiro, panorámica y arcoiris gigante

FOTOS SAN IGNACIO MINÍ


Fachada de la iglesia jesuíta

lunes, 25 de abril de 2011

Mendoza

El viaje hasta Mendoza fue laaargo. De Cafayate a Tucumán, por unas carreteritas que eran un poema. Luego de Tucumán a Mendoza en un autobús Suité, olé. Pero suite de verdad... el asiento se reclinaba 180º, es decir, que ibas tumbado completamente, con mantita, almohadita, un colchón mullidito... incluso teníamos cortinilla de separación para no vernos la cara por si nos enfadábamos, jeje.
Bueno, pues 10 minutos de viaje y nos viene el mozo a ofrecernos una copa de champán! olé olé. Y luego la cena tipo avión, con vino (no olvidar que nos dirigíamos a la capital argentina del vino!!), y por si fuera poco, al acabar... copazo que nos ofrecieron. Y como dice una buena amiga, no tomarlo es perder dinero (más que nada porque ya lo habíamos pagado al pagar el pasaje), así que bueno, Tía María con hielo, no está mal.
Disfrutamos la película que nos pusieron: The Marine... imaginaos, menos mal que nos la pasamos riéndonos porque vaya peliculón, encima doblado con acento mejicano y con subtítulos en argentino... no coincidían!! Os resumo el argumento: Jonhy Tritony (así decíamos nosotros) es un marine que le echan del ejército porque en Irak se carga a unos malos que estan maltratando a sus compatriotas, entonces como él ha nacido para ser marine, no puede vivir... está deprimidito. Entonces se va de vacaciones con su mujer y mientras está echando gasolina, otros malos malísimos que robaron una joyería y están fugados secuestran su mujer ... pero Jonhy Tritony va a rescatarla y al final, después de aguantar pàlos, explosiones, balas, etc etc. se carga a todos, salva a su mujer y se acaba la peli. Pa matarte.
Bueno llegamos a Mendoza y esa tarde recorrimos las cinco placitas de la ciudad. En la Plaza de la Independencia, la más grandota y céntrica había chiringuitos de artesanía y nos hicimos amigas de los hippies vendedores, así que después del paseo nos fuimos a beber vinito con ellos al parque. Muy majos sí.
Y al día siguiente, circuito por el Parque Nacional del Aconcagua. Pasamos por unas montañotas muy coloreadas, vimos el Puente del Inca, que es un puente natural de color marrón amarillento debido a las aguas termales que tienen un montón de sales minerales, y al final nos dimos un paseíto hasta un mirador para contemplar el Cerro Aconcagua, el más alto de América.
Al día siguiente yo me tenía que cambiar de hostel, pues era Semana Santa y no tenían lugar en el que estábamos. Así que tomamos un taxi y nos llevó a la dirección del hostel donde había reservado pero cuando llegamos allá no había ni hostel ni leches... así que hale, a un ciber centro a buscar alojamiento en plena Semana Santa.
Terminé en un party hostel, otra vez, pero bueno, esta vez me daba más igual :) estaba bastante bien y ofrecían asado por la noche!
Pero la previa al asado fue la visita a 2 bodegas, una industrial y otra artesanal, y a una fábrica de aceite de oliva, todo ello acompañado con las catas de rigor, claro.
De vuelta, acompañé a la Mara a la estación, ya se iba a Buenos Aires... qué rápido pasaron los días... y la cantidad de cosas que hicimos! Y Sarini triste y solita se quedó.
De vuelta al hostel conocí a un wey mejicano que estaba viajando en moto. Llevaba 8 meses de viaje y quería continuar por Europa, hasta llegar a Tailandia o por allá... Muy simpático oír el acento mejicano. Luego me junté con unos canarios también que estaban estudiando en Santiago de Chile y después de reposar el asado me fui a dormir.
Al día siguiente, la cosa fue relajada: mate en el hostel, comidita casera... Me fui a despedir de los hippies y prontito a la cama, pues al día siguiente viajaba a San Agustín de Valle Fértil, en la provincia de San Juan (aún tierra de vinos!!)

Cafayate

Después de una relajada tarde en el pueblito fuimos a dar una vuelta para ver si había algo de marcha... pero la marcha argentina empieza retarde, y como en el hostel de Salta no dormimos muy bien, habíamos estado todo el día por ahí... al final decidimos volver al hostel.
Estuvimos jugando a las cartas con una autraliana y un lugareño y hale, a dormir que al día siguiente nos íbamos de paseo.
Pues eso, nos fuimos de paseo por el río Colorado, por un cañón en busca de una cascada. Al principio intentamos ir solas pero luego terminamos uniéndonos a un grupo que iba acompañado por un muchachito que hacía de guía. Casi mejor porque el camino no estaba marcado y tuvimos que cruzar el río 13 veces!!
Al final por supuesto metimos los pies, jeje, pero porque no quedaba otra eh! no porque fuéramos torpes, jiji.
Y llegamos a la cascada acalorados, nos pusimos el traje de baño, nos metimos al agua y... AAAAAAAAAAAAYYY qué fría, más que la de la Caldera de Duruelo. Pero bueno, nos hicimos la foto de rigor!!
Bajamos por otro lado, contemplamos el valle y por fin llegamos al punto de partida.
Por la tarde nos fuimos a comer un merecido helado. Y como estábamos en la tierra de los vinos... pues ¿de qué lo íbamos a pedir? Nos pedimos un helado de Torrontés, ese vino blanco afrutado tan riquísimo! pero el señor heladero que era la mar de majo nos puso una mini bola de helado de vino tinto... una maravilla.
Y después tarde relajada en el patio del hostel, las parras nos daban sombra y acompañando la lectura, tomamos mate, nuestro primer mate, nuestro de verdad porque usamos el mate comprado y ya curado por nosotras!
Y por la noche, nos pusimos las botas otra vez, a un precio ridículo en un restaurante de lugareños donde los perros ponían ojitos para que les echaras un cachito de carne... pero estaba todo tan rico que ni esos ojitos de gato de Shrek nos convencieron y nos lo comimos todo todo!!

sábado, 23 de abril de 2011

Los valles calchaquíes

Después del extenuado viaje con el auto no nos quedaban más ganas de manejar por las sinuosas carreteras argentinas... así que contratamos un tour al pueblo de Cachi.
Siete de la mañana y nuestro chófer, Daniel, nos espera en la puerta. Pero lo curioso es que el viaje era en petit comité, sólo la Mara, Sarini y Jeremy, un australiano que poco sabía de español.
Daniel, un personaje muy curioso: unos 50 años, vividor como nadie, con ganas de juerga, sin pelos en la lengua y por supuesto, mujeriego. A todo esto, se le puede añadir que fue conductor de rallies... jeje otra aventura en la carretera.
Pasamos por Cerrillo, un pueblo donde el Carnaval se celebra a lo grande: los hombres se disfrazan de diablo y van a las afueras del pueblo a desenterrar a un diablo... cuando vuelven las mujeres les esperan disfrazadas, y cada hombre elige a una mujer, sin saber si es la suya o la de otro... juntos recorren las calles del pueblo invitando a todo el mundo a unirse a la fiesta y al final, se van juntos a pecar durante nueve días... y tienen que pecar, porque si no el diablo se la cobra... esas historias nos contaba nuestro amigo Daniel. Todo esto con traducción por nuestra parte para el australiano, que abría los ojos mucho pero se reía un montón también.
A todo esto, no os conté cómo son los bidet acá... en España el agua sale por los bordes y hacia abajo; sin embargo acá en la Argentina hay un grifo en el fondo y cuando abres la llave del agua sale un chorrillo hacia arriba, mucho más práctico. Y, ¿por qué os cuento esto? bueno pues porque intentábamos explicarle a Jeremy lo que era un bidet y su función, con un inglés muy correcto y palabras técnicas, hasta que Daniel puso su espectacular aportación: "el bidet sirve para lavarse la cola". Y punto final, mucho más claro y preciso. No sé si el australiano se enteraría de algo, pero bueno, nosotras nos reímos un rato largo.
Empezamos la ascensión por unas carreteras sinuosas, otra vez. Y otra vez, espectaculares vistas del valle, colores rojos entremezclados con verdes, riadas de agua en medio de la carretera que más de una vez se llevaron autos, curvas y más curvas, la presión que tapona los oídos... cambiamos de valle y voilà, la niebla desaparece y el señor Lorenzo brilla en el cielo... llegamos al Parque Nacional de los Cardones.
Los cardones son los típicos cactus que aparecen en los dibujos de Lucky Luck, esos que son bien rectitos con bracios sobresaliendo a los lados. La madera es muy bonita, pues parece que la han tallado y le han dibujado rombitos, pero no, es todo obra de la Pachamama.
Pues bien, en el este parque se pueden ver de todos los tamaños, con bracitos, brazotes, sin ellos, haciendo la V de victoria, con posturas eróticas (por supuesto aportación de Daniel), petisos (=pequeños), grandotes... Un paisaje curioso.
Comimos en un pueblo, que no recuerdo el nombre, un asado de cabrito y cordero... espectacular.  Llegada a Cachi, heladito y vuelta a Salta.
Habíamos pensado ir a Cafayate en el colectivo, pero Daniel nos convenció para que hiciéramos el tour con él... y como nos lo habíamos pasado tan bien, pues al día siguiente de nuevo nos embarcamos con él y con una chica israelita... un mal cambio porque si bien Jeremy era un salao, esta chica era "una insulsa", palabras textuales de Daniel.
Pasamos por Cerrillo otra vez y escuchamos la historia del carnaval, por eso me la sé tan bien, jeje. Tomamos la ruta en dirección Cafayate. Ese día el paisaje fue más espectacular, si cabe. Las montañas habían sido moldeadas durante miles de años al capricho de los elementos: la erosión del agua y del viento, dando lugar a formas espectaculares como la Garganta del Diablo, esta vez sin agua; el anfiteatro, con una acústica casi tan buena como la del Teatro Colón de Buenos Aires; el capricho de viuda (echadle imaginación... y no os costará mucho adivinar lo que se veía), ante el cual mi comentario fue "ah sí, pero se ve mejor de lejos" y la respuesta de Daniel fue "sí, pero de cerca se siente mejor, dicen".
Por el camino nos entraron ganas de "mojar las barbas" entonces necesitábamos encontrar un baño entre la naturaleza... se lo dijimos a Daniel para que parara el auto y nos dijo que si no encontrábamos un sitio apropiado que lo hiciéramos al estilo boliviano: "os tapáis la cabeza que por la cola no os conoce nadie". A todo esto, si aún no sabéis lo que es mojar las barbas, os diré que la versión para los hombres es "cambiarle el agua a la aceituna" que parece que canarios no hay por acá.
Por fin llegamos a Cafayate, tierra de vinos. Visitamos un par de bodegas donde catamos unos caldos ricos ricos. El mejor: un torrontés tardío, esto es un vino blanco echo con uvas que se recogen un poquito más tarde... dulcecito, afrutado... un manjar digo del dios Baco.
Y ya no regresamos a Salta con Daniel y la chica insulsa. Nos quedamos en la tierra de vinos en un hostel bien majo con un patio interior lleno de parras, donde curamos los mates para empezar a usarlos y sustituimos el agua por vino, como líquido esencial para cualquier ser vivo.

viernes, 22 de abril de 2011

La aventura salteña-jujeña

Llegamos a Salta bien prontito por la mañana. Después de instalarnos en el hostel fuimos a hacer los recados urgentes: cambiar plata y alquilar un auto para recorrer el Norte de la provincia de Jujuy: La Quebrada de Humahuaca.
Hechos los recados, recorrimos la plaza, comimos humitas (masa de maíz y queso envuelta en las hojas del maíz) y empanadas en el mercado central, con los lugareños, y subimos a un cerro para contemplar una panorámica de la ciudad. Subiendo nos encontramos con Pedro y Luisa, una pareja que estaba de luna de miel con la que también coincidimos en Iguazú y le tomamos una foto... Después de 5 minutos de charla les ofrecimos que se unieran a la expedición con el auto. Se lo iban a pensar, nos dijeron.
Un rato más tarde, la parejita valenciana confirma asistencia. Para finalizar bien el día: de tenderetes. Y por fin, el momento esperado: nos compramos un mate, una bombilla de alpaca, yerba y un termo. 100 % estilo argentino.

PRIMER DÍA DE AUTO: SALTA-HUMAHUACA-TILCARA:
Al día siguiente comienza la aventura: manejar por las carreteras Argentinas!! Pedro y yo fuimos los conductores. Nos dieron un opel corsa sin cierre centralizado ni dirección asistida, pero con aire acondicionado, OEOEEE.
Primera parada: Jujuy city. Pedro manejó por La Cornisa, una carretera bien estrechita en la que de vez en cuando se veían señales del tipo: "Uno por vez". Así de estrecha era. Pero llegamos a Jujuy, nos tomamos un café e hicimos cambio de conductor. Madre mía Sarini fitipaldi!!
Pasada Jujuy entramos en la Quebrada de Humahuaca. La quebrada es un valle con colores espectaculares en las rocas a lo largo de la cual hay pueblecitos bien cucos, con casas de adobe, algunas calles sin asfaltar y gente tranquila. Paramos en Maimara a comer, justo en frente de un pequeño local en el que nos pusimos las botas los cuatro por 80 pesos (menos de 20 euros - los 4, no cada uno!!). Continuamos hacia el Norte y llegamos a Humahuaca. Paseamos por el pueblito, visitamos una escuela, conversamos con los artesanos y cuando llegamos al auto... habia una raja en el parachoques de atras... bueno, con la esperanza de que no se dieran cuenta los de Hertz cuando devolvieramos el auto volvimos hacia Tilcara.
Llegamos por la tarde noche y busca que te buscara, acabamos en un hostel la mar de lindo. Una cabañita para los cuatro, con cocinita, baño y una habitacion con dos cuchetas (=literas).
Al principio las hermanas Martin dudabamos que la pareja de luna de miel quisieran compartir la habitacion con nosotras, por el hecho de que estaban de luna de miel... pero como son una pareja bien original, divertida, con un sentido de la aventura espectacular (se vinieron con nosotras en el coche sin apenas conocernos... y se fiaron de mi conduccion, jeje!!), nos dimos cuenta cual era el estilo que les gustaba en sus viajes, tienen un autentico corazon de mochilero!! asi que los cuatro nos metimos alla.
Fijaos cual fue nuestra afinidad, que sin prepararlo, con la comida que ellos trajeron y la que nosotros llevabamos, mas unas cervecitas que compramos, cenamos como reyes en nuestra cabaña. Y a la luz de una tenue bombilla, tumbados unos en hamacas, otros en tumbonas, contemplamos las estrellas, conversamos y nos fuimos a dormir.

SEGUNDO DIA DE AUTO: TILCARA-PURMAMARCA-SALINAS GRANDES-SALTA
Nos levantamos temprano y nos metimos entre pecho y espalda un tremendo desayuno. Bendito hostel, que maravilla. Pedro, otra vez al volante, nos llevo hasta la Garganta del Diablo, otra vez, vaya carreterita!! sinuosa, de ripio y aunque no habia señales indicando "Uno por vez" lo podias percibir... Esta Garganta del Diablo es nada parecido a la de Iguazu, pero igual, bonita. Esta vez era un cañon que formaba el rio. Estuvimos andando por unas pasarelas que recuerdan a La Yecla burgalesa.
Despues, a Pucara, una ciudad precolombina que recorrimos con un guia con una capacidad de transmision de informacion enorme, precisa, concisa. Nos conto cosas sobre la flora, la fauna, la historia y los errores que los arqueologos de Buenos Aires hicieron en la reconstruccion del lugar. Realmente fea la piramide faraonica que los chabones se construyeron para ser enterrados en el lugar que destrozaron mas que arreglaron. Muy interesante.
Y Sarini al volante, llevo a los viajeros hasta Purmamarca, donde compramos viveres, fotografiamos velozmente al Cerro de los Siete Colores, nombre literal, una montaña que parece que la han pintado a rayas con colores calidos: rojo, marron , rosa, violeta, gris... y nos dirigimos por la sinuosa carretera hasta Salinas Grandes.
Me gusto conducir trazando las S de la ruta mientras camiones kamicazes sin carga me adelantaban, luego yo los volvia adelantar aun habiendo raya continua y DOBLE (estilo argentino, o adelantas o mueres chupando rueda) y mientras ascendiamos hasta los 4.000 m de altura. Como os podeis imaginar, el paisaje espectacular.
De repente, ya en la bajada se diviso al fondo una extension blanca... eran las salinas. Llegamos al lugar y lo primero, ponerse las gafas de sol, la luz reflejada quemaba!! Fotos y mas fotos en el paisaje blanco. Habia piletas abiertas, con agua salada y helada, en las que si metias la mano, cuando se secaba se quedaba bien blanca, por la altisima concentracion de sal.
Comimos en una fabrica de sal nuestros sandwichitos y cuando estabamos acabando una familia argentino-francesa llegaron muertos de hambre. En el lugar no habia nada para comprar comida asi que les dimos lo que nos sobraba... y que contentos!! Pues tenian 1 h hasta Purmamarca, asi que hicimos la obra de caridad del dia :)
Vuelta a Purmamarca. Queriamos hacer la caminata que rodea al cerro coloreado pero nos dimos cuenta de que ibamos con el tiempo pegado al culo, asi que cafe rapido para despejarnos despues de la solana que nos dio y para Salta.
De nuevo Pedro al volante, con su conduccion maestra y ya habituado a las costumbres argentinas; sorteo camiones, mas camiones, curvas y contracurvas... parece que llegabamos a tiempo y de repente... la policia argentina nos para a la entrada de Salta, cuando nos quedaban solo 20 minutos para devolver el carro. Nada un control rutinario... llegamos 5 minutos antes del cierre y aun asi la chica nos dio permiso para rellenar el tanque de gasolina.
Para mas suerte, o la raja del parachoques estaba o no se dieron cuenta, pues nada dijeron al respecto.
Para finalizar la aventura terminamos de gastarnos el bote comun que habiamos puesto en empanadas y cerveza.
Y ya, les dijimos adios a la genial y original pareja, con la que hicimos una simbiosis espectacular. Un placer haber compartido esos dias con vosotros.
Que vivais felices y comais perdices, como en los cuentos!!

sábado, 16 de abril de 2011

San Ignacio y los jesuítas

Una pena no habernos podido quedar más tiempo en este pueblo. El colectivo nos dejó en medio de la ruta, de noche... pero encontramos sin problemas la entrada del pueblito y el hostel. Si el de Puerto Iguazú era el chollo del año... éste hostel era el del siglo!! Pileta (=piscina), hamacas paraguayas, una casa preciosa, desayuno espectacular... y todo barato barato! Incluso estrenamos el aire acondicionado.
En San Ignacio están las ruinas de la misión San Ignacio Miní (miní=pequeñito) de los jesuítas. La verdad es que tuvimos mucha suerte de que Julio fuera nuestro guía. El chabón empezó a hablarnos en guaraní... jiji un cachondo. Nos contó muchas cosas, se iba por las ramas cada dos por tres (la visita guiada duraba 45 minutos y con el duró el doble!!), nos contó su visión religiosa y política de la historia argentina, muy interesante.
La visita a San Ignacio fue veloz, pero valió la pena. Ese mismo día, a las 12.05 pm tomábamos el colectivo. Al menos, eso ponía en los pasajes.
Suerte que estuvimos a las 11.45 am, porque a las 11.46 am llegó el colectivo y tan pronto nos montamos el colectivo se fue (???) Y nos quedó la duda de qué hubiera pasado si hubiéramos llegado un ratín después... pues hacíamos transbordo en Resistencia. En fin, el gafe de la Mara parece que se había pasado.
En Resistencia tomamos el colectivo rumbo a Salta, en total 21 h de viaje, del Noreste al Noroeste argentino.

Las Cataratas de Iguazú

Si bien el Glaciar Perito Moreno me dejó la sangre helada en las venas al contemplar el abrumador escenario de colores azules, cuyo silencio lo quebrantaba de vez en cuando un crujido del hielo que estaba a punto de caer al agua provocando un estruendo que en segundos se extinguía... otra sensación invadió mi cuerpo cuando nos aproximamos a la Garganta del Diablo (lado Argentino).
A lo lejos, desde la pasarela sólo se veía una nube en el cielo, la del agua que se evaporaba cuando caía los no sé cuantísimos metros de esta cascada.
Unos metros más adelante estaba el mirador que permite contemplar la grandeza de esta obra de arte de la Pachamama (la Madre Naturaleza). Mi sangre fluía como lo hace el agua y de la emoción al cumplir otro sueño en este viaje, no pude evitar llorar por la lindísima postal que tenía ante los ojos: un ruido ensordecedor, agua, agua y más agua cayendo y sol, mucho sol.
No sé si Ennio Morricone habría visitado las Cataratas de Iguazú cuando compuso la banda sonora de La Misión, pero la música es muy acorde al paisaje. No me la pude quitar de la cabeza en todo el día!!
Después nos fuimos a recorrer las pasarelas para contemplar otra parte del parque. A la hora de comer, sacamos nuestro tupper y demás delicatessen y nos montamos un picnic. Atraído por el olor del chorizo un coatí glotón nos hizo levantarnos para evitar robos indeseados.
Los coatíes son animalitos muy monos, son como un peluche, muy abrazables, con un morrito que detecta olor a comida a la legua, una cola larga larga... y con unas zarpas que dan miedo. Son unos ladronzuelos trasmisores de la rabia, así que nos tuvimos que terminar el arroz de pie, mientras el animalito acechaba, jeje.
Después de esta intensa experiencia, fuimos a ver la última parte del lado argentino, el salto de San Martín. Tomamos un barquito, nos pusimos como una sopa porque nos metieron debajo de una catarata y ya felices nos volvimos a Puerto Iguazú para descansar en el hostel con piscina (PISCINA, por 13 €/noche per capita!!! chollo del año) para recargar las pilas para el día siguiente.
Lo dicho, as irmãs Martín fomos visitar mais uma vez as Cataratas do Iguaçu pra o Brasil. Desde una perspectiva distinta el lado brasileiro es también bien lindo. Desde allá se aprecia todo lo larguísima que es la falla que forma las cataratas y al final hay una pasarela desde la que se ve la Garganta del Diablo, el río Iguazú y los arcoiris más grandes que jamás había visto en mi vida (más de 180º de arcoiris!!). Otra vez me puse como una sopa, pues el viento arrastraba las gotitas de agua hasta la pasarela.
Y más coatíes glotones rondaban por el parque!!
Nos costó irnos, pero nos teníamos que ir a tomar un colectivo hasta San Ignacio: adiós cataratas, un placer, muito obrigada pela sensação, hasta la próxima!!

Y las fotos?

Estimado adeptos lectores,
Debido a la intensa y frenética actividad turística a la que se somenten las hermanas Martín cuando se juntan, me es imposible adjuntar fotos en estas entradas, ya que demora un rato... así que de momento habrá relatos varios y, en cuanto pueda, os pondré una entrada con fotos.

La Mara llega a Buenos Aires... qué quilombo!

Asi es, la Mara se dio mucha maña y me llamo a las 6h30 de la mañana desde el aeropuerto para decirme que estaba en el colectivo que va hacia Buenos Aires. Quedamos en que nos veiamos en el hostel. Llegue la primera y fui a su encuentro a la parada de subte (=metro). Cuando nos abrazamos unos pelotudos la rociaron de una salsa blanca (no comments) lo que implica normalmente el inicio de una accion llamada robo. Pero estabamos a 10 m del hostel asi que no paso nada.
Fuimos a La Boca aprovechando que el hostel organizaba el tour. Asi nos evitabamos ir solas a ese barrio que dicen es tan peligroso. Pues bien, visitamos La Bombonera, el museo de Boca Juniors, vimos fotos de D.A Maradona cuando aun era flaco (esto es, no un tonel, no confundir con el vocablo argentino para referirse a chico) y otras cosas varias. Despues de la comida, conocimos la calle Caminito, muy pintoresca, llena de bailaores de tango y casas de colorines.
Callo lluvia en cantidad por la tarde, asi que la visita a San Telmo para otra vez. Y luego nos fuimos a tomar algo con mi primer couchsurfer, Pablo, para dejarle unas cosas en su casa.
Fue un dia largo, a la 1 am llegabamos al hostel... en el cual habia una fiesta llena de p... guiris adolescentes muy problematicos y sobre todo, ebrios a mas no poder; en fin, que se puede esperar de unos guiris?
Pues en fin, nos fuimos a dormir y de 2 a 3 tuvimos el honor de oir a los p... pibes gritando, voceando, vomitando y todas esas cosas que se hacen cuando uno esta bebado como um cacho, expresion portuguesa que significa: borracho como una cuba.
Al final, una rafaga de ira me inundo y terminamos a gritos y algo mas con una rubia que estaba gritando a una puerta. A la mañana siguiente nos enteramos que habiamos dormido en un Party Hostel, asi que ajo y agua para las hermanas Martin.
Llegamos al aeropuerto y tachaaaan, vuelo retrasado 2 h. Nos montamos en el avion y un señor dice que ha visto su maleta irse de baretas, en otro avion... jeje, que pobre señor!
Llegada a Puerto Iguazu... 20 pasajeros acompañaron al pobre señor porque sus 20 maletas no habian llegado a su destino, entre ellas la mia!
Vaya quilombo (=jaleo) de dia... pero llegamos al hostel, habia piscina, la temperatura era espectacular, la habitacion genial y como sorpresita final... mi maleta llego a las 23h30!!
Asi que tras un dia caotico... todo se apaño.
Dormimos soñando con las cataratas que visitariamos al dia siguiente...

martes, 5 de abril de 2011

Vuelvo a tomar aire... para saludar otra vez a Buenos Aireeees

Pues si, de nuevo estoy en Buenos Aires, como dice Calamaro, yo vuelvo y revuelvo varias veces al año, porque bien lo merece la ciudad.
Ya deje las frias tierras del Sur y tambien las tranquilas ciudades rodeadas de naturaleza. Cuando me baje del colectivo en Plaza Italia, el nudo de las comunicaciones de Buenos Aires... buf, termine de aterriza, colectivos, coches, bicis, motos, gente, contaminacion... Welcome back!!
Los dos primeros dias me quede en un hostel que quedaba en el barrio de Palermo. Y estuvo genial porque el barrio esta chachi. Recorri las callecitas y los jardines, fui a ver el MALBA, el museo de arte contemporaneo de latinoamerica, anduve de aca para alla... siempre hay algo que hacer.
La estancia en el hostel estuvo bien, alla conoci a Jesi, uma garota brasileira muito simpatica com a que pratiquei a conversa, quase tinha esquecido o meu portugues!!
Despues del finde me mude a casa de Paulina, una amiga de Pako que vive en otro barrio, asi que chapeau! asi conozco y me voy orientando por al gran ciudad.
Otro dia fui al cine, a ver una peli de Ricardo Darin, Un cuento chino. Muy simpatica y Darin espectacular como siempre. Tuve tambien el gusto de asistir a La Bomba del Tiempo, un espectaculo de percusion en el Centro Cultural Konex. He aqui un ejemplo de mi control sobre los colectivos de la ciudad. Resulta que la performance en cuestion era en la calle Sarmiento 3131... y yo tan pincha me planto en Avenida Sarmiento... Por que hay dos calles con el mismo nombre???!!! 10 minutos faltaban para el comienzo del espectaculo y yo estaba a bastantes cuadras del lugar correcto. En fin, puse mis piernas en movimiento, rapido al subte, coordinacion total solo un minuto de espera. Me bajo en Pueyrredon, de nuevo, un minuto y aparece un colectivo que me deja a solo 2 cuadras del lugar... en media hora estaba moviendo mi esqueleto al ritmo de los tambores africanos.
No pude localizar a la gente de couchsurfing pero... conoci a una chica boliviana que tambien estaba solica y despues un par de tipos se nos intentaron plantar delante y con mucho salero les dije que na nai de la china que eramos mas bajitas y al final, nos hicimos amigos jiji.
Y nada, ahora un par de dias mas hasta recibir la grata visita de mi usual compañera de viaje: mi hermana favorita!!!! Juntas nos iremos al Norte... a remojarnos en las Cataratas de Iguazu y a empaparnos de cultura andina en el Noroeste!

sábado, 2 de abril de 2011

Ushuaia


La ciudad más austral de la Argentina está ubicada donde bien expresa la foto:


Ya deje los hostales para volver a quedarme en casa de un couchsurfer, Rubén, un emprendedor, saxofonista y vividor de la vida, este fue mi couch durante los cinco dias que me quede por el Sur. El chico se montó una empresa de turismo y hace viajes al Parque Nacional Tierra de Fuego. Desafortunadamente, justo la semana que estuve yo no le salio nada, pues ya estamos en temporada baja.
El primer día, había planeado tomármelo con calma, ver lo que ofrecían la ciudad y los alrededores, así que fui a la ofi de turismo, al banco, a sacar el pasaje para Buenos Aires... y a informarme de las excursiones en barquito... y resulta que más casualidades de la vida, cuando estaba preguntando entró Johannes, el alemán que conocí en Buenos Aires y con el que fui a San Telmo y a ver el Río de La Plata... así que me uní a la excursión del barco, ya que él ya la había contratado.
Fuimos a ver unas islas donde había cormoranes y otras aves varias, nos vistieron de butanitos para que no nos mojáramos en el velero:


Después navegamos a otras islas a ver los leones marinos y más cormoranes: 


Y como fue un viaje en petit comité, 6 personas, nos fuimos juntos a cenar centolla, que es típica de Ushuaia. Yo le había preguntado al guía un sitio bueno, bonito y barato para tal evento... pero otra vez me junté con p... guiris, a parte de llevarme a cenar a las 7h30, fuimos a un sitio pichi máximo, es decir, que ahí sí que me doblaron y me crujieron  las costillas, a parte de dejar de propina un riñón y las dos córneas. Sin palabras. Por lo menos la cena estaba espectacular, el vino y el postre (entenderéis la factura de 4 dígitos, en pesos  argentinos eh!! que no en lereles) Luego una cervecita al Dublín y a casita.
Al día siguiente Johannes y yo intentamos subir al cerro Martial a ver al glaciar del mismo nombre pero amaneció gris y subiendo nos cayó una nevadita... así que nos fuimos a comer a las 12 pm, yo ya le voy cogiendo el gusto (e interpretad el verbo como queráis), a esto de los horarios europeos... me va a venir bien cuando me vaya a Alemania. 
Por la noche nos juntamos los mismos del barquito en el mismo bar, el Dublín... pero aún siendo martes se montó una fiesta... pero acabó un poco mediocre, la gente muy borracha y el canadiense del barquito echando los trastos a toda hembra que se le cruzaba en el camino, proposiciones indecentes con voz de gangoso y cara de mamón... así que hice la 13/14 y eché una bomba de humo y Sarini se fue a la cama.
Al día siguiente, otra vez de relax, porque no madrugué. Fui a comer al centro y paré en un restaurante bien barato pero con una carne, qué rica!! Y allá conocí a Umberto, un porteño que era marinero desde los 16 años, y que me estuvo contando su vida en el mar, que había estado en 106 países, que tenía sangre gallega (de los gallegos de verdad), que le habían pegado dos tiros, uno de ellos en la cabeza ,en Buenos Aires... muy interesante el personaje. Me invitó a comer así por mi cara bonita y luego incluso al café :)
Después de la entretenida conversación me fui a ver el Museo de la Prisión de Ushuaia, bastante curioso. Fijaos lo aburridos que estaban los presos, que hacían unas manualidades muy raras:


Y por fin, al día siguiente me fui al Parque Nacional Tierra de Fuego... con tan mala suerte que se pegó lloviendo todo el día. Allá caminé con Inés una jovenzuela alemana (imán, imán) que no le gustaba el trekking y se notaba, jeje, pero que era simpática.
Nada más llegar nos saludó el señor Zorro, curioso, a ver si le dábamos algo de comer:


Caminamos a lo largo de la costa, luego por el bosque, vimos lagunas, turberas y aunque el cielo estaba gris, nublado y el día frío y desagradable, eso no quitaba para que los colores del otoño adornaran el paisaje y deleitaran nuestros ojitos:


Por la noche, como tenía una espinita por ir a aquel restaurante bueno bonito y barato a comer pescado... allá que me fui, y desde luego mis ganas de matar a aquellos guiris aumentaron. Por la mitad de dinero, comí el doble en un ambiente más familiar, más como me gusta a mí.
Y nada, ya me despedí de la Patagonia. Fue un placer pero los 25 ºC de Buenos Aires me apetecía agarrarlos... y ahorita, mientras escribo estas líneas... voy en chanclas y tirantes :)